Mis descubrimientos sobre la Alegría

He descubierto estas vacaciones que la alegría no es una virtud, sino una consecuencia de varios buenos hábitos. Entre ellos, cultivar el optimismo. ¿Cómo se logra éste optimismo? manteniendo el ánimo contento, con independencia de las circunstancias exteriores. Es decir, aprendiendo a ver lo bueno de las personas, sacando partido positivo a las circunstancias adversas y sabiendo volver a empezar ante las frustraciones y los fracasos.
Esto no se logra de una forma mágica, sino con el ejercicio constante de mirar la vida como una oportunidad diaria de mejora.
Otra cosa que aprendí es un ejercicio de "agradecimiento diario" por todas las cosas buenas que a uno le pasan cada día.
La alegría no solo se puede basar en los éxitos laborales o sociales, o en el dinero, porque esto puede ser esporádico. Por eso, la alegría debe estar fundamentada en el amor a Dios y en el servicio a los otros.
Se ayuda a los demás, sonriendo sinceramente. Haciendo pequeños servicios al prójimo, olvidándose de uno mismo.
Por último, dormir lo suficiente. Las deudas de sueño, siempre se pagan, comúnmente con malgenio.

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